Con Luz Propia es el último libro de Michelle Obama, un libro en torno a lo que podríamos llamar la autobiografía de la autora, quien nos habla de su vida, poniendo de centro temas como la autoestima, el autoconocimiento, las representaciones sociales, la importancia de la familia y la red de vínculos.
Michelle Obama, aunque es conocida como la ex primera dama de los EEUU, su hoja de vida va más allá de ello; es abogada, socióloga, especialista en estudios afrodescendientes, lideresa de la comunidad afro, anfitriona de un podcast y productora audiovisual. También ha sido considerada como una de las mejores 10 abogadas de los EEUU.
Una de las apuestas que escribe Michelle Obama en su libro es la necesidad de brindar herramientas para tejer relaciones duraderas y sinceras a partir de la narración de varias historias de vida con el propósito de avanzar en medio de la adversidad, la desesperanza, la incertidumbre y la injusticia social.
Es por ello, que al crear una caja de herramientas personal invita al lector a analizar su experiencia de vida, reconociendo el legado de sus ancestros y ancestras en la configuración de ella como madre, hija, esposa, líder, a través de un relato autobiográfico íntimo de superación personal, siempre atado a la idea de que el éxito sería imposible sin la presencia y ayuda de su familia, amigos y compañeros de trabajo. Así pues la autonarración es clave para preguntarse ¿Cómo hemos superado las tormentas que han aquejado nuestras vidas? ¿Con qué herramientas contamos para enfrentar las adversidades? ¿Qué podemos hacer para convertirnos en faros o luces para otros? Al autonarrarse, la autora se encuentra a sí misma, consideramos que este libro le ayuda a desligarse de su imagen de primera dama y la muestra como una mujer aunque privilegiada, frágil, común, empoderada, resiliente, reconstruida a partir de experiencias de vida donde los otros son relevantes.
El texto “Con Luz Propia” es un buen ejemplo del subgénero narrativo conocido como autoetnografía el cual sustenta que los relatos sobre una vida individual pueden responder sobre el contexto que forma parte de la vida de esa persona, en otras palabras es posible conocer sobre una sociedad a través de los relatos autobiográficos. Según lo anterior los textos autobiográficos son relatos personalizados donde los autores relatan sus experiencias vividas que relacionan lo personal con lo cultural. Lo que hace relevante este asunto, es que a partir de las narrativas autobiográficas se contribuye a visibilizar la diversidad de voces que emergen en momentos y contextos histórico-sociales específicos y que dan cuenta de problemáticas situadas de acuerdo a los intereses del autor-a.
Así, Michelle en este libro se muestra altamente comprensiva del otro, de su vulnerabilidad, de sus potencialidades, pues describe como la Pandemia del Covid, acontecimiento que marcó rotundamente las vidas de todas las personas, así como las redes sociales, nos han desconectado los unos de los otros. Es por ello que en su libro la búsqueda pasa por reflexionar cómo configurar relaciones íntimas, auténticas y eficaces.
Si bien el libro tiene múltiples bondades, no es una lectura para todo el mundo, pues desde que nos asignaron en un principio este texto, nos generó diversos sentimientos pues descubrimos que las lecturas de autoayuda, superación personal no eran nuestro géneros favoritos a la hora de elegir el libro a leer, además al ser un grupo que estudia los temas de género y diversidades sexuales nos pensábamos en un texto que nos hiciera reflexionar de una forma crítica los feminismos, el racismo, así como cuestionar desde nuestras propias experiencias y el conocimiento que se pueda generar o deconstruir junto a la autora. No obstante, al ser un libro sugerido por Manos Visibles decidimos empezar a leer con una actitud abierta, de escucha y comprensión, con el fin de dejarnos sorprender por lo que Michelle nos pudiera decir desde su experiencia de vida.
Así pues, a algunas nos atrapó el libro por la forma que tiene la autora de contar las historias que se vuelven ligeras, refrescantes, la conexión también se dio por las similitudes en la etapa de la edad que algunas del grupo están, porque las experiencias personales, familiares, académicas, de amistad y pareja se reflejan en nuestras propias historias de vida, el cómo nosotras vemos el mundo y el mundo cómo nos ve a nosotras con el merecer y el no merecer, que se conecta con el síndrome de la impostora, reconociendo nuestros propios sentimientos de miedo. Descubrimos que su intención simplemente es mostrar su caja de herramientas para situaciones difíciles y lo que a ella le sirvió. A pesar de que es muy difícil ofrecer “una fórmula de autoayuda” consideramos que para cualquier mujer resulta muy provechoso si logra identificar cuál es su caja de herramientas a ejemplo de la planteada por Michelle en su texto y también responder algunos de los interrogantes con los que nos interpela sobre la manera como nos sentimos con nosotras mismas, nuestro cuerpo y nuestra historia. Si bien el libro es claro en mencionar que no tiene pretensiones de convertirse en un recetario para afrontar las tormentas o para configurar la autoestima como clave para la superación de las dificultades, este, como lectoras consideramos no logra profundizar en las opresiones históricas de las mujeres, aquellas que nos permitan entender el sexismo, el racismo, las interseccionalidades que desembocan en privilegios y el colonialismo.
Pues como lo hemos venido reflexionando en los diversos círculos de lectura el amor propio no resuelve las opresiones estructurales que vivimos las mujeres en sus múltiples diversidades, es por ello que nos hubiera gustado una mirada más profunda al respecto y aún así, apelamos a nuestras opiniones de forma crítica comprendiendo que ella no tiene la responsabilidad para hablar de dichos temas, sino que es libre de exponer sus propios deseos individuales.